Bueno, hoy
vamos con la última receta del año, ya que no volver a publicar hasta después
de reyes, este postre me parece muy rico y fácil. En mi casa a todos nos
encanta, sobre todo a mi hija, como te descuides en comer, ni lo pruebas, jaja,
es una galocha igual que su madre, que le vamos a hacer. A lo que voy, me parece
un postre estupendo para terminar una buena cena de navidad, es de sabor suave
y no es muy dulzón, lo justo.
Sin más os
dejo con la receta, espero que lo paséis muy bien, que seáis muy felices y que
tengáis una entrada de año fantástica. Un besazo enorme para tod@s.
Ingredientes: Para 8 personas
7 Yemas de huevo
100gr Azúcar blanca
1½ Vainas de vainilla
450ml Nata repostería
250ml Leche
Azúcar
para caramelizar
Preparación:
Para esta receta necesitaremos el horno, lo pondremos a
precalentar a una temperatura de 140º.
Pondremos en una olla la nata, la leche, el azúcar,
cogemos la vaina de vainilla, la abrimos por la mitad y con la ayuda de la
punta del cuchillo la rasparemos para sacar las semillas y poder añadirla a la
olla, la vaina también la añadiremos, ponemos al fuego a fuego medio.
Con ayuda de unas varillas iremos removiendo hasta justo
que rompa a hervir, para retirar del fuego y dejar reposar para que la vainilla
suelte su aroma, dejaremos que se entibie un poco.
Mientras tanto iremos cascando los huevos, solo
necesitamos las yemas, las claras las reservaremos en la nevera para otro
postre.
Una vez tengamos todas las yemas, con ayuda de las
varillas mezclaremos bien, ahora cogeremos la olla donde tenemos la nata y le
quitaremos la vaina de vainilla e iremos incorporando poco a poco a las yemas
de huevo, esto lo tendremos que hacer mientras estamos removiendo con las
varillas.
Cuando tengamos todo el contenido de la olla
incorporado a las yemas, removeremos un poco más y pasaremos el contenido del
bol otra vez a la olla.
Volvemos a poner la olla al fuego, a fuego medio, con ayuda
de las varillas iremos removiendo hasta que empiece a hervir, retiraremos del
fuego.
Nos prepararemos una bandeja apta para horno donde cojan los ocho moldes,
para hacerlos al baño maría. Ponemos los tarros y con ayuda de una jarra iremos
añadiendo agua caliente a la bandeja hasta cubrir la mitad de los tarros.
Ahora cogemos un bol, colaremos el contenido de la olla y con ayuda de un
cucharon iremos rellenando todos los tarros, una vez los tengamos todos listos,
volveremos a añadir agua a la bandeja hasta donde nos permita.
Una vez listo meteremos en el horno y lo dejaremos unos 50 minutos, para
comprobar que esta lista abriremos un poco el horno y tocaremos la parte de
arriba tiene que quedar como si fuese gelatina.
Cuando pase el tiempo sacaremos del horno y sacaremos todos los moldes de
la bandeja para dejarlos enfriar a temperatura ambiente.
Una vez estén fríos los meteremos en el frigorífico hasta la hora de
consumir.
Antes de consumir le pondremos un poco de azúcar por encima y con ayuda de
un soplete de cocina quemaremos el azúcar hasta crear una costra.
Lista para
comer.